Archivo de la etiqueta: detective Guardarropa

161. Asesinato en el hospital

Al llegar al hospital, el detective Guardarropa se encontró con que un ocupante de una habitación acababa de morir. El policía Descuidos, que estaba de guardia, le aseguró que nadie había entrado en la habitación desde que, dos horas antes, una enfermera le había tomado la presión y la temperatura. Guardarropa examinó la habitación: lo único extraño que encontró fueron unas hojas de papel arrugado en una papelera, una manzana a medio comer y un paquete de cigarrillos vacío. Al salir le dijo al policía que había mentido: era evidente que alguien había entrado en el cuarto recientemente. ¿Por qué?

160. ¿Suicidio o asesinato?

Guardarropa abrió la puerta y se encontró con una situación sorprendente: en una habitación de 5x5x5 metros, un hombre colgaba de una cuerda. Había agua en el suelo. En una esquina de la habitación estaba instalada una cama; en otra, una mesa con una silla tumbada junto a una ventana. La única puerta de la habitación había sido cerrada por dentro. La distancia entre el suelo y los zapatos del hombre era de dos metros. Parecía un simple suicidio, excepto por el hecho de que los pies del muerto estaban muy lejos del suelo y no había ningún objeto cerca sobre el que subirse. ¿Se trata de un verdadero suicidio? ¿Es un asesinato?

156. Marinero de agua dulce

El detective Guardarropa entró en uno de los salones del crucero y escuchó como Mentiro Sillo se jactaba de su proeza: «He sido marinero durante 20 años y nunca había vivido una experiencia como esta. Al salir de la habitación oí disparos y vi a un hombre en la parte delantera del barco con una pistola en la mano, así que me eché al suelo y me cubrí la cabeza. Al cabo de un momento me di cuenta de que tenía la pistola al alcance de la mano. No me lo pensé, la cogí y disparé dos veces, hiriendo en una pierna al asesino. Después de eso me dirigí corriendo a la parte trasera del barco. Allí todo el mundo me felicitaba: había herido al malhechor y me había convertido en héroe por un día». Guardarropa dudaba que alguien se creyera esta historia. ¿Por qué?

145. El robo de Staff Ador

Eran las 16:00 y hacía calor. El detective Guardarropa se dirigió a Staff Ador cuando éste salía de su casa vistiendo sólo unos pantalones cortos y un reloj de pulsera. «Hace dos horas ha habido un robo», le dijo el detective, «y el ladrón responde a tu descripción». Staff se echó a reir y se tendió sobre el capó de su camión. «Este camión y yo acabamos de llegar de Sierra Alta hace diez minutos. Por si no lo sabe, está a más de 500 km. Puede llamar a mi primo, que vive allí, para verificarlo». Guardarropa le preguntó: «¿a qué hora saliste de allí?». Ador respondió: «Creo que serían sobre las 8 de la mañana». «Mientes», le contestó el detective. ¿Cómo lo supo?

90. Muerte en la nieve

El puente estaba cubierto de nieve. Las pisadas de una persona conducían hasta el cuerpo tendido a mitad del puente. El detective Guardarropa dedujo que se trataba de un suicidio, puesto que las únicas huellas eran las de la mujer muerta. Sin embargo, no se había encontrado aún el arma. Guardarropa encontró pólvora en la sien de la muerta y los indicios de que un poco de nieve parecía haber sido barrida de la baranda del puente sobre el río helado. Había numerosas pisadas de la mujer por toda esa zona. La otra única pista era un agujero en la helada superfície del río, justo debajo de donde faltaba la nieve en la baranda. ¿Cómo pudo la mujer dispararse y hacer desaparecer el arma?

84. Robando bajo la lluvia

Mientras Guardarropa esperaba a que Staff Ador le abriese la puerta de su casa, le comentó a su compañero: «Está lloviendo desde el mediodía y no he cogido paraguas…» Cuando Staff les abrió, el detective le preguntó qué había hecho durante la tarde; acababan de robar un banco y los testigos decían haber visto a un ladrón parecido a él. «He llegado hace 15 minutos. Por cierto, casi tengo un accidente, pues el coche pierde mucho aceite». Guardarropa se acercó al coche y miró debajo: había una mancha de aceite sobre el pavimento seco. El motor estaba todavía caliente. «Lo ha intentado, pero no lo ha conseguido», le dijo el detective. «Seguiremos el interrogatorio en comisaría». ¿Por qué?

72. El salvamento de Staff Ador

El guardacosta recogió a un náufrago que llevaba varios días perdido en una pequeña barca sin motor y a la deriva. Staff Ador, sudoroso por el calor, subió a bordo y bebió unos cuantos vasos de agua antes de hablar con el detective Guardarropa: «Mi amigo Juan y yo salimos a pescar en su barca, pero se estropearon el motor y la radio. Las corrientes nos llevaron mar adentro. Hace tres días que nos quedamos sin comida ni agua. Juan empezó a beber agua de mar y muy pronto comenzó a delirar. Se levantaba, gritaba… hasta que cayó, se dio un golpe en la cabeza y murió». El detective, que lo escuchaba, lo miró y le dijo: «Por lo que me cuentas y por lo que veo, no tengo más remedio que acusarte de asesinato». ¿Por qué?

69. Misterio en el sanatorio

Una nueva aventura de nuestro querido detective…

El detective Guardarropa llegó al sanatorio mental femenino de la ciudad poco después de recibir la llamada de la directora del centro. En cuanto llegó se puso a buscar al intruso que se supone que había entrado en las instalaciones. Registró cada una de las habitaciones con detenimiento y, al terminar, afirmó que probablemente se trataba de algún amigo de la chica de la habitación B del primer piso. Al cabo de unos minutos, el visitante apareció, confirmando las sospechas del detective. ¿Cómo lo dedujo Guardarropa?

60. El robo de la taberna

Vamos a pensar un poco…

el detective Guardarropa se acercó a Staff Ador y le dijo: «creo que eres la persona que acaba de robar en la Taberna del Tintorro Rojo hace un par de horas. La descripción que han hecho los testigos apunta a ti: un hombre que ha estado bebiendo como una esponja antes de robar a los clientes». «Claro que estoy borracho. Soy catador de vinos profesional y he estado trabajando durante las últimas cinco horas», le contestó Staff, indignado. Guardarropa le preguntó qué hora era. «Las siete y media», le contestó. «Entonces, ¿a qué hora has empezado a trabajar?». Staff miró el reloj y le dijo: «A las dos y media». «Mientes», le espetó el detective. ¿Por qué?

45. El apartamento de Andresita

Andresita Piñata volvió a su apartamento y vio que alguien había entrado y lo había destrozado todo. Los cuadros estaban rotos, las cartas personales hechas trizas, los muebles volcados, había grafitis en las paredes y su ropa estaba manchada y rasgada. Andresita dijo al detective Guardarropa que creía que Staff Ador, su antiguo novio, tenía probablemente algo que ver en todo ello. Cuando el detective le interrogó, Staff afirmó no saber nada, pero añadió que haría cualquier cosa por descubrir a un salvaje que escribía obscenidades en las paredes. Después de hablar un poco más con él, el detective le acusó de haber entrado en el piso de Andresita. ¿Qué le hizo suponer que era culpable?

43. Lleno, por favor

El detective Guardarropa condujo hasta la gasolinera y se detuvo ante los surtidores. «Lleno, por favor», pidió el detective. «Le parecerá extraño», dijo el hombre de la gasolinera, «pero prefiero llenar el depósito a dos coches de forasteros que a uno de alguien del pueblo». Guardarropa miró hacia la pequeña población y le contestó: «Sé perfectamente a lo que se refiere». ¿Por qué pensaba así el hombre de la gasolinera?

Vamos, que es facilito 🙂

22. El trance de Guardarropa…

El detective Guardarropa cruzó la calle y penetró en el edificio del Servicio Secreto. Entró en el ascensor, puso su tarjeta de seguridad en la ranura correspondiente, pulsó el botón del piso 36 y descendió hasta el cuartel general. Al salir del ascensor, Guardarropa tuvo que esperar a ser recibido por sus superiores. Mientras aguardaba, contempló por una pequeña ventana una vista aérea de la ciudad: las personas pequeñas como hormigas, los coches como cajas de cerillas…, y todo ello en un día precioso, con un cielo azul en el que no había ninguna nube. De pronto, se produjo un flash de luz muy intensa. El detective supo inmediatamente lo que había ocurrido. ¿Lo sabes tú también?

Es evidente, ¿no? jejeje

17. Atraco a los billares

Uno de pensar un poquito más…

Staff Ador repetía su historia en la comisaría: «Estaba en la calle Ancha mirando pasar a la gente cuando pasó corriendo un tipo con un taco de billar en la mano. Me asusté y eché a correr pensando que huía de algo peligroso. El sargento Pelotas me arrestó pensando que era yo el hombre que él perseguía y que, según me hizo saber, yo había robado la recaudación del día de los Billares La Bola. Sin embargo, yo nunca había estado en ese lugar, aunque cuando volví alí con el sargento, algunos de los clientes creyeron reconocerme; ¡si ni siquiera sabía que existía el local!». El detective Guardarropa leyó la declaración y le dijo al sargento: «Felicidades, ha arrestado usted al verdadero culpable». ¿Cómo lo supo?

No es ninguna quedada, ¿eh? que sus veo venir… es de darle al tarro y ver el error… en la declaración de Staff Ador 😉

¡Suerte!

9. Muerte en el coche

Para este hay que pensar un poco más…

La señora Traspiés fue hallada muerta, en su coche, con un agujero de bala en el corazón. Su mano derecha agarraba con firmeza una pequeña pistola. El detective Guardarropa examinó el arma y vio que se trataba de la misma que había realizado el disparo y, tras echar una ojeada al cadáver dedujo que había muerto desangrada. Encontró también una nota donde anunciaba su suicidio. Un análisis grafológico posterior confirmó que el mensaje había sido escrito por ella misma. El forense determinó que la muerte se produjo por una hemorragia de 20 minutos de duración. Pese a todo, Guardarropa estaba convencido de que se trataba de un homicidio. ¿Porqué?

Este va para todos aquellos que os gusta tanto el CSI, jejeje 😉