Archivo de la etiqueta: detective Guardarropa

256. Excusas cantantes

«¡Por fin os encuentro!» dijo sonriente Andresita Piñata, mirando al detective Guardarropa y a Acérrimo Terco, conocidísimo tenor. «Espero contar con vosotros en la fiesta de esta noche», continuó, dirigiéndose a Acérrimo. «Lo siento en el alma», contestó éste, «pero esta noche tengo una actuación en la Ópera». La respuesta de Piñata no se hizo esperar: «¡Pues mañana organizaré otra fiesta en tu honor!» Terco le dijo: «Me sabe muy mal, pero canto también mañana y, al día siguiente, en Londres. Descansaré unos días y después iniciaré una gira por el mundo que durará varios meses». Se despidieron y siguieron paseando. «Espero que no se haya dado cuenta de que estaba poniendo excusas», le dijo Acérrimo a Guardarropa. ¿Cuál era el engaño?

255. Robo en casa

Staff Ador estaba en su casa cuando, según dijo al detective Guardarropa, alguien llamó a su puerta. «En aquel momento fui a abrir la entrada para ver quien era. Recuerdo perfectamente el momento, pues dejé el punto de libro entre las páginas 129 y 130, molesto por tener que perder el hilo de tan interesante lectura. En cuanto abrí la puerta no vi a nadie pero escuché un ruido al otro lado de mi casa. Cuando llegué a la habitación donde me pareció que había oido algo no había ya nadie, pero dos de los cajones del mueble estaban abiertos y habían robado los documentos que había dentro». «Hay algo en su historia que le delata», le replicó el detective. ¿De qué se trata?

241. El robo de las monedas

Staff Ador se encontró con el detective Guardarropa en el vestíbulo. «Seguro que ha visto la nota en el ascensor», le dijo. «Han cortado el gas y la luz, desde las doce de la noche hasta las seis de la madrugada. Un ruido me ha despertado poco antes de las seis. He mirado por todo el piso y, como no he visto a nadie, me he metido en el baño. Pero, a media ducha, he oído el ruido otra vez. He vuelto a mirar y esta vez he visto a alguien que salía del piso; por desgracia el vapor del baño no me ha permitido distinguir cómo era. Lo peor es que ha desaparecido mi colección de monedas», dijo Staff. «Tenga cuidado o desaparecerá también su libertad», le replicó Guardarropa. ¿Por qué?

240. Muerte en el taller

Un lunes por la mañana, el detective Guardarropa recibió una llamada del taller mécanico de Ridí Culo. Se había producido un trágico accidente. Uno de los propietarios había sido atrapado bajo un automóvil mientras estaba reparándolo; inexplicablemente el gato con el que lo había levantado había cedido. Rudy Mentario, el socio de Ridí explicaba: «Estaba tomando café y mirando las cotizaciones de la 6bolsa en el diario, cuando oí un ruido de metal roto seguido de un grito de dolor. Cuando llegué, mi pobre socio ya había muerte». El detective le contestó rápidamente: «Hay algo de lo que dice que le delata». ¿De qué se trata?

224. Asesinato en la redacción

Disculpas generales por mis continuados retrasos. Mantener al día este blog no es facil y me supone muchas horas. En general, dedico algún rato a programar varias entradas por si algún día no puedo escribir, pero últimamente me falta tiempo para muchas cosas y, entre ellas, seguir escribiendo con regularidad.

Me gustaría poder seguir escribiendo a buen ritmo y sin retrasos, pero por ahora me es dificil asegurar algo. En cuanto a los comentarios sobre vuestras respuestas, tampoco tengo mucho tiempo de mirármelo cada día y poder responder o comentar vuestras soluciones, aunque a veces, cuando me pongo, hago borrón y cuenta nueva con las que hay pendientes.

Espero poder seguir al día y ofreciendoos este pequeño espacio de entretenimiento. ¡Muchas gracias por la paciencia y los ánimos!

Cuando Acérrimo Terco, el director de la prestigiosa revista Tecnociencia, volvió de comer, se encontró con el detective Guardarropa. «Se ha encontrado estrangulada en el aparcamiento a la Srta. Piñata, su redactora-jefe. Le han robado el bolso y todo lo que llevaba de valor», dijo Acérrimo. En ese momento, el detective vio un mensaje que Andresita había dejado en el ordenador de Terco: «Acerrimo, perdona el retraso. Ya se qe la reunion es a las tres, pero e tenido que ir un momento al coche a buscar una cosa. Piñata». Después de leer la nota, Guardarropa dijo: «Aquí hay algo que no me gusta». ¿Qué le ha parecido extraño al detective?

221. El asunto Don Tanto

«Salté la valla y caí en el jardín de Don Tanto», explicaba Staff Ador. «Advertí unas luces en el último piso y vi a Porciento en el suelo, atado de pies y manos. Inmediatamente, apareció un hombre con barba y gafas de sol. Al ver que era el asesino que están buscando, me olvidé por completo de robar y me preocupé de ayudar al señor. Así que subí rápidamente los cuatro pisos, pero, por desgracia, llegué demasiado tarde; el asesinato ya se había cometido y el criminal había huído. Como no podía hacer nada por el pobre muerto, salí de la casa y ustedes me detuvieron». El detective Guardarropa le contestó: «Nadie va a creerse tu historia». ¿Cuál es el error?

209. Asesinato en cinco días

El detective Guardarropa subió por la colina hasta la casa de Fermincito. Como nadie le abrió, decidió entrar y encontró a Fermincito en el suelo, en medio de un charco de sangre y con un agujero de bala en la cabeza. Una nota justificaba su suicidio: «Desde que no puedo andar, sobrevivo gracias a la buena voluntad de Staff Ador, que me sube provisiones cada semana; le dejo a él toda mi fortuna». El perro del detective comenzó a seguir un rastro que les llevó a casa de Staff. Cuando el detective le dijo a Staff que Fermincito había muerto, exclamó: «¡Qué desgracia! Le vi hace cinco días y estaba perfectamente». Guardarropa le dijo: «Cuénteme qué ocurrio». ¿Por qué dudaba el detective?

196. Aviso de asesinato

Staff Ador esperó a que el profesor Listillo saliera del despacho de Mentiro Sillo. Se puso un par de guantes y entró en el despacho de Sillo. Luego apuntó y disparó. Ador tiró la pistola al suelo y llamó a la policía. Después de fue a su propio despacho y se quitó los guantes. Cuando el detective Guardarropa llegó, Staff explicó lo sucedido: «Estaba trabajando cuando oí un disparo. Corrí hasta el vestíbulo y vi al profesor Listillo salir corriendo del despacho de Mentiro Sillo. Al entrar, le vi tendido en el suelo, así que llamé inmediatamente a la policía». Algunas horas después, el detective ordenó arrestarle por asesinato. ¿Por qué fue tan fácil pillarle?

195. Asesinato en el sótano

Ridí Culo encontró a Rudy Mentario muerto en el sótano. Explicó que había sospechado que algo ocurría, porque Rudy no había recogido el correo del día anterior. Decidió entrar y encontró a Mentario con una gran mancha de sangre detrás de la cabeza, muy cerca de la cámara frigorífica. Parecía como si hubiese resbalado y se hubiese golpeado contra una de sus esquinas. Cuando se le preguntó sobre la mancha de sangre en la manga, Ridí contestó que había examinado el cuerpo antes de avisar a la policía y que se había manchado sin querer. La baja temperatura del cuerpo indicaba que la muerte había ocurrido hacía más de 12 horas. Pero el detective Guardarropa seguía convencido de que Ridí era culpable. ¿Cómo podía estar tan seguro?

193. El robo de las joyas

«La única llave de la habitación donde se guardan las joyas de mi difunta tía está en mi poder», decía Staff Ador. «Desde que murió, hace una semana, ni yo ni nadie más ha entrado en el cuarto y, de acuerdo con su última voluntad, el dinero obtenido de la venta de sus joyas se destinará a obras de caridad», concluyó. El detective Guardarropa apartó una planta cuyas hojas, giradas hacia la pared, molestaban para aercarse a la caja fuerte. Mientras Staff la abría, Guardarropa cruzó la habitación y se sentó cerca del ventanal. Cuando Ador abrió la caja y cogió la bolsa con las joyas, el detective dijo: «Estoy seguro de que las joyas son falsas o de que faltan unas cuantas». ¿Por qué?

192. Envenenado con cianuro

«Es extrañó», pensó Guardarropa. La autopsia reveló que don Din murió envenenado con cianuro. Encontraron su cuerpo cerca de la barbacoa, todavía caliente. La autopsia también reveló que acababa de comerse dos bocadillos, una bolsa de patatas fritas y unas cerezas. Al registrar los alrededores, la policía encontró una nota de suicidio, la pluma usada por el doctor para escribirla, una caja de cerillas, una moneda, una bolsa de patatas fritas vacía y un papel con el que se habían envuelto los bocadillos. Como no se encontró nada más, el detective estaba seguro de que el cadáver había sido llevado hasta la escena del supuesto suicidio. ¿Por qué?

191. Un suicidio sospechoso

Encontraron muerto a Mercro Mino en su biblioteca. Tenía la cabeza apoyada sobre su grabadora de cintas y, desde la puerta, el detective Guardarropa vio que tenía la pistola en la mano derecha y un agujero de bala en la sien del mismo lado. El inspector cogió la grabadora y apretó el «play», escuchando entonces una voz: «Soy Mercro Mino. Estoy harto de todo. Ya no aguanto más. Nos veremos en el más allá». Después sonó un disparo y el ruido de su cabeza golpeó el cassette; luego, el clic que indicaba el fin de la grabación. Guardarropa estaba seguro de que alguien había imitado la voz de Mercro para simular un suicidio. ¿Por qué pensaba que se trataba de un asesinato?

179. Asesinato en la sauna

Los cuatro amigos se encontraban cada día en la sauna. Mentiro Sillo y Staff Ador leían el periódico, Agri Cultor llevaba un termo con algo para beber y Rudy Mentario explicaba lo que haría con el millón de euros que estaba a punto de ganar. Un día, al salir de la sauna, se dieron cuenta de que Rudy se había quedado dentro. Cuando fueron a buscarle, le encontraron muerto de una puñalada en el corazón. El detective Guardarropa buscó pistas e interrogó a los testigos pero no obtuvo ningún resultado. Ni siquiera la autopsia reveló cuál había podido ser el arma homicida. ¿Sabes quién lo hizo? ¿Y cómo?

196. Robando cuadros

«Esta noche Staff Ador intentará sacar del país los cuadros robados. No sabemos cómo lo hará, pero podemos esperar cualquier cosa», decía el detective Guardarropa. «Debemos buscar, sobre todo, la Mona Lisa; se trata de la pintura más valiosa». Aquella misma noche, le llamaron del aeropuerto y le dijeron que acababan de detener a Staff. Iba disfrazado, con bigote postizo y gafas oscuras. En un tubo de cartón llevaba planos de arquitectura y, entre ellos, el famoso cuadro. «Déjenlo marchar», les ordenó el detective. ¿Por qué?

162. Asesinato en la nieve

Otro de asesinos 😉

El detective Guardarropa salió al despuntar el día a pasear por el bosque. Aunque la luz del sol le cegaba, seguía los pasos marcados sobre la nieve por uno de los compañeros de excursión, el fotógrafo Nikón Nisín. Después de un recodo en el camino, lo halló muerto; tenía una flecha clavada en la espalda. Volvió corriendo a la cabaña y encontró a los demás compañeros desayunando. Quedaron consternados al conocer la historia. Staff Ador repetía que no lo podía creer, Ridí Culo recordaba que Nikón le había comentado su idea de ir a fotografiar pájaros de madrugada y Rudy, que contaba sus flechas, informó de que le faltaba una. «Uno de vosotros es el asesino», dijo Guardarropa. ¿Quién cree que ha sido? ¿Por qué?